la pelea del siglo (1/3) "Gokú"

Antes de leer tenga en claro que esta no es una historia chistosa, es como una novela triste o algo asi.

¡AY! que pena, nuestro Santiago esta invadido por perros vagos. Un fenómeno triste por donde se le mire, pero dentro de toda la tristeza se pueden rescatar anécdotas increíbles, curiosas o aburridas.

Gokú no sólo es el querido personaje principal de la serie dragon ball, sino que también es el nombre de muchos perros vagos. Esta tendencia se dio mucho en la época en la que dragon ball estaba de moda, ya que los flaytes (los que ahora conocemos como OLD SCHOOL) al igual que en la actualidad le ponían nombres chulos y feos a sus mascotas. El perro del Freddy fue víctima de esta lamentable moda, se llamaba Gokú.

Los primeros meses de Gokú en la casa del Freddy fueron muy buenos. Se le daba cariño, lo bañaban regularmente y dormía con los niños y cuando la condición económica de la familia lo permitía era alimentado con pedigree. Pero todo cambió cuando al Gokú se le pegó por primera vez la tiña. Fue relegado a dormir en el patio, ya nadie le hacía cariño ni jugaba con el, ni siquiera el pequeño niño flayte Freddy, no por estar conciente de los graves problemas sanitarios que implicaban el haber jugado con el perro, sino que por que simplemente el perro ahora era feo. El niño ya estaba aprendiendo lo que es aparentar. Gracias a los baños de parafina Gokú se sanó de su tiña, pero las cosas no volvieron a ser iguales. Ya estaba grande y había perdido la ternura que tenía de pequeño y los padres del Freddy le habían regalado un play station (el primero eso si) por lo tanto ni se le pasaba por la cabeza jugar con Gokú. Ahora gokú tenía completa libertad de salir a la calle cuando quisiera, ya que su familia ya no lo quería. No pasó nunca hambre, porque la abuela de la familia dejo comida en la calle hasta los últimos dias de Gokú.

Con el tiempo gokú fue adquiriendo experiencia callejera. Las peleas contra otros perros le dieron habilidad en la batalla y el correr detrás de los autos le dio velocidad y resistencia. Al año de vivir en la calle se hizo el guardián oficial del pasaje donde vive el niño Freddy. Junto a su amigo Toqui hacían que los desconocidos pensaran dos veces antes de pasar por el pasaje, ya que la defensa por parte de los perros era tan feroz que desconfiaban de quien no tuviese un olor familiar.

La comunidad de los demás lugares que no fueran el pasaje donde residía Gokú exigían tomar medidas a los aun considerados dueños del perro, ya que se estaba continuamente expuesto a que el perro mordiera a algún adulto o peor aun, un niño. El padre de Freddy por primera vez sintió que debía asumir la responsabilidad que recaía sobre el ser considerado aun el dueño del perro, por lo tanto, tomó al perro, lo metió en su camioneta y se lo llevo con destino a la Panamericana. Una vez ahí, Don papá de Freddy le ofreció a Gokú un apetitoso pedazo de carne. El perro sin sentir las reales intenciones del caballero saltó con desesperación afuera de la camioneta en busca de la carne, pero apenas tocó el suelo sintió como la camioneta iniciaba una frenética huida. Gokú ni siquiera quizo hacer uso de sus habilidad de perseguir autos, ya que entendía que había sido abandonado, pero sin embargo en ese mismo instante Gokú decidió que debía volver a su querido pasaje.

Pasaron tres dias desde el fatídico día de la panamericana, el llanto de los niños había sucumbido ante la resignación de no ver a su querido perro nunca jamás. Los niños hablaban de que estaría haciendo en este momento su querido amigo Gokú cuando de repente ven a Gokú entrando al pasaje nuevamente. La alegría reinaba entre los infantes del sector a la vez que los adultos entendieron que era imposible deshacerse de Gokú. Obviamente la muerte del can no era una opción, por que los padres velaban por el bienestar de sus hijos y sabían cuanto estos querían a su perro defensor del pasaje.

Pero la historia de Gokú no podía ser eterna, se acabó el día que se encontró con Vegeta, el perro del “otro pasaje”…


esta fue la primera parte de la saga "la pelea del siglo" una cosa de historia de perros

Historias de terror de barrio

La Guagua

En chile, mas específicamente en Santiago, más concretamente en un barrio de la comuna llamada San Joaquín, se cuenta que algunas noches por ese barrio cuando dan justo las doce de la noches se escucha el alarmante y terrorífico llanto de “la guagua”, es un quejido que demuestra un gran sufrimiento, noches de gritos y quejas horribles son las que tienen que soportar los vecinos de este humilde barrio en San Joaquín.

La historia cuenta que cuando se empezó a escuchar el espantoso sonido en el barrio una vecina del lugar embarazada, al no soportar el espantoso y estresante llanto de “la guagua” salió a preguntar casa por casa por el barrio, indagando quién era el responsable de este bebe que lloraba con tan desagradable sonido que no la dejaba ni dormir, ni alimentarse, ni cuidar su embarazo tranquila, por más que busco no encontró en ninguna casa de los alrededores un bebe. La mujer con el tiempo enloqueció, se dice que por los llantos endemoniados de “la guagua” y que cuando su bebe recién nacido lloro una noche en la cuna la mujer frenética y desesperada por el sonido lo mato a golpes.

Ahora en este barrio de San Joaquín se cree que cada vez que se escucha el llanto de la supuesta “guagua” llorar toda la noche es que algún niño morirá, es por eso que los vecinos al escuchar el pavoroso llanto se colocan a rezar para que no muera ningún bebe.

Esta historia se cuenta por mi barrio, es una de las típicas historias de terror de barrio que te cuentan cuando pequeño y que no te dejaban dormir, ahora las encuentras ridículas, aunque aun me sigo asustando cuando escucho llorar una “guagua” por las noches de mi barrio. Sería bueno que si tienen mas historias de terror de barrio avisen, bueno eso chabela Chacabuco chayam.

El Chico del pórtico ayuda.

En un afán por crear más cultura, el Chico del pórtico decide crear una campaña de ayuda para problemas comunes en este caso las secreciones y desechos naturales del cuerpo humano.

Mucosidad.

Muchas veces en el metro o en la micro o simplemente en calle te vez atacado por el típico moco doloroso picoso, ¿nunca has sabido como disimular la extracción de esta maldita secreción mucosa?

Algunas técnicas.

El moco doloroso picoso se caracteriza por no salir con la sonada fuerte y sonara que se hace con papel higiénico o pañuelos, esto debido a su fuerte y dolorosa adhesión a la pared nasal. Ahora existen dos técnicas, si posees papel higiénico o pañuelo debes hacer un lulo con el papel enrollándolo como si fuera una lanza e introducirlo disimuladamente en tu orificio nasal afectado, así escarbas hasta que salte. La otra técnica un poco mas rustica es cuando no posees el papel higiénico o pañuelos, acá debes actuar con otra parte de tu cuerpo, el dedo meñique es perfecto, por eso sería bueno que empezaras por dejarte una uña más larga en este dedo para que puedas prepararte para estas desagradables e inesperadas situaciones de moco doloroso picoso, aunque si no tienes cuidado al hacer esta técnica con la uña de tu dedo tienes el peligro de crear una herida, esto empeoraría la situación, porque se transformaría al moco sangroso. Siempre es bueno cuando el resultado es satisfactorio al sacar tu moco doloroso picoso de tu orificio nasal, sientes un gran orgullo y por lo general lo dejas pegado en alguna superficie para mostrarle a la gente lo que lograste sacar de tu nariz y que luego alguna persona que pase diga sorprendida “oh que gran moco”, en algunos casos el orgullo y placer llega al extremo transformándose el individuo en un “mocopófago” o come mocos.

Vendrán más ayudas del chico del pórtico para secreciones y desechos humanos como la orina y el excremento. Gracias por leer, postea o te llenaras de mocos dolorosos picosos.

En semana santa…

tiempo de reflexión… frases como esta te hacen pensar.

“La virgen dice que coman tierra… ¡todos!”

Miguel Ángel el vidente de la virgen de Peña blanca y ahora travesti.

¡HOLA!

Tienes que salir temprano de su casa a cumplir alguna misión. Nada muy importante, seguro es una reunión con amigos para jugar una “pichanga” en el parque. Para ser mas exacto son las ocho de la mañana cuando sales. Casi en el mismo instante te das cuenta que tu vecino esa haciendo algún tipo de trabajito en la entrada de su casa, uno de esas típicas actividades que un señor jubilado realiza un sábado por la mañana. Con el mejor ánimo del mundo, por que has tomado un buen desayuno, debes estar en la mejor forma para la ardua jornada deportiva que te espera y además eres feliz, saludas a tu vecino.
-¡Hola, vecino!- dices levantando tu mano y haciendo el signo de paz y amor.

-¡Hola, mijo! ¿Cómo esta?

-Bien ¿y usted?

-Bien también, aquí haciendo algo por la vida, que si no la jefa me pega (haciendo alción a su esposa)

-jejejejejeje. Que bueno. Que le vaya bien.

-Igual a ti, mijo.

Miras hacia delante y te pones los audífonos para emprender el camino hacia el parque.

Ya termino el partido, lo pasaste bien. Ahora el único problema es volver a casa, porque la paja es mucha. Para cuando lo consigues ya han pasado unas cinco horas desde que saliste de tu casa, es decir, son las uno de la tarde mas o menos. Cuando vas llegando a tu casa ves que tu vecino esta aún ahí, haciendo los trabajitos para que la “jefa” le de almuerzo. La dificultad ahora esta en que no sabes que hacer… ¿lo saludas de nuevo? Si, por que tu ánimo y simpatía sigue siendo el de la mañana y aunque te sientas un idiota, le dices:
-¡Hola, vecino!- dices levantando tu mano y haciendo el signo de paz y amor.

-¡Hola, mijo! ¿Cómo esta?

-Bien ¿y usted?

-Bien también, aquí haciendo algo por la vida, que si no la “jefa” no me dará almuerzo

-jejejejejeje. Que bueno. Que le vaya bien.

-Igual a ti, mijo.


Entras a tu casa, te bañas y luego almuerzas.


Mientras te estas reposando del rico almuerzo preparado por tu madre, suena el teléfono. Es tu amigo que te invita a juntarse para hacer algo y matar la tarde, le dices que si y sales raudo en tu bicicleta. Cuando empiezas el aceleramiento sale de su casa el vecino y e dices a ti mismo: “Ahora si que no le saludo, ya lo hice dos veces hoy y no quiero seguir sintiéndome un idiota que saluda a cada rato, como si no me acordase que ya lo vi en el día y que mas encima lo saludé dos veces” Sin embargo…
-¡Hola, vecino!- dices levantando tu mano y haciendo el signo de paz y amor.

-¡Hola, mijo! ¿Cómo esta?

-Bien ¿y usted?

-Bien también, aquí. Voy a comprar el pan (ya que es un jubilado que toma once a las cuatro)

-jejejejejeje. Que bueno. Que le vaya bien.

-Igual a ti, mijo.


Te vas con la vista al frente, por que si no lo haces seguro que algún auto te atropella, pero quieres agachar la vista ya que te sientes un estúpido.


Vuelves a tu casa y adivina, esta parado afuera de su casa fumando un cigarro y le dices:
-¡Hola, vecino!- dices levantando tu mano y haciendo el signo de paz y amor.

-¡Hola, mijo! ¿Cómo esta?

-Bien ¿y usted?

-Bien también, aquí fumándome un puchito pa’ pasar las tenciones

-jejejejejeje. Que bueno. Que le vaya bien.

-Igual a ti, mijo.

Ya es de noche y te preparas para salir, tu mejor pinta, la mejor disposición. Te despides de tus papás y tu hermano y cuando sales…
-¡Hola, vecino!- dices levantando tu mano y haciendo el signo de paz y amor.

-¡Hola, mijo! ¿Cómo esta?

-Bien ¿y usted?

-Bien también, aquí esperando a la “jefa” que vamos a ir a pololear

-jejejejejeje. Que bueno. Que le vaya bien.

-Igual a ti, mijo.

Te sientes tan idiota que te agarras la cabeza pero no piensas en otra cosa que no sea que lo saludaste por cuarta vez.
Ya es el otro día, no dormiste mucho. Estas bien pero con sueño. No ves a tu vecino que esta parado en la puerta de su casa. Entras a tu casa y duermes y duermes mucho. Es domingo, te dispones a gastar el último día de la semana con tus amigos. Se juntan a almorzar y cuando sales está tu vecino haciendo otro trabajito. Piensas “¡NO! De nuevo el condenado dialogo” el te dice:
- ¿Que usted no saluda ahora mijo? Ni que hubiese dormido con uno pués. No por que este grande y salga de noche tiene que dejar de saludar a la gente, se lo digo yo.

Nueva sección

Dentro de las innumerables secciones que tiene este blog, acabo agregar una nueva. La nueva sección es el relleno.
La principal función de esto es mantener con vida el blog. Ya que si no hay nadda que ver acá nadie entrara a verlos, además, se pifió el contador de visitas, asi que este coso cada vez se vuelve más inservible.